PEDRITO EL MENTIROSO

Por Carlos Maldonado

Ah, Pedrito, Pedrito, como siempre teniendo la fea costumbre de mentir en un espacio público. El de hoy 12 de octubre de 2010, por ejemplo, en Prensa Libre en su columna Lobotomía.


Por lo menos, el joven que cuenta, defendió las bondades de la revolución cubana, tuvo el valor suficiente para expresar sus ideas en público so pena de ser pisoteado por Pedrito y sus seguidores quienes se creen poseedores de la verdad absoluta y, por lo mismo, no soportan que su idea de sociedad consumista sea cuestionada ni mucho menos que otras realidades fuera de la influencia del sacrosanto mercado, sean posibles. Yo creo que eso fue lo que realmente enfadó a Pedrito para animarlo a escribir este sandez: que las bondades de una sociedad socialista, pese al bloqueo asesino que ejerce sobre su población Estados Unidos, no haya doblegado a su pueblo y mucho menos, le haya impedido establecer verdaderas conquistas para todos sus habitantes, y que eso, hubiera sido divulgado por el joven universitario que pese a no haber ido a Cuba tiene a mano muchos otros medios para informarse de esa realidad tales como las estadísticas de la CEPAL, la ONU donde se reconoció públicamente que es el único país que ha alcanzado las Metas del Milenio y muchas de éstas fueron rebasadas ya, en la reciente cumbre o, la UNESCO que ha reconocido que Cuba posee una de las mejores calidades en la enseñanza incluyendo la superior. Cositas que Pedrito en su estrechez ideológica no termina de entender.

Al contrario, Pedrito furioso por esa visión que escapa a la propaganda trillada y desprovista de toda seriedad como la que propalo en su columna de hoy tiene que ser reforzada, como todo irresponsable, primero, con la descalificación y el ataque personal hacia quienes no piensan como él. Segundo, a la mentira falaz de decir, por ejemplo, que en Cuba existe una “dictadura que cada día asesina a muchos cubanos”. Tanta desfachatez y frescura no había visto juntas.

Y, usted Pedrito Trujillo, ¿ ha visitado Cuba para asegurar semejantes disparates? ¿Dónde están las pruebas de semejantes disparates? Por que si usted habla en un espacio público tiene que rendir pruebas a los lectores. Esa clase de “opiniones” no deben caber en medios que se consideren serios.

El que miente descaradamente para defender una postura es alguien bajo. No puede ser tomado en serio, menos erigirse como periodista.

Pedrito, ya no siga engañando a los jóvenes de quien usted es catedrático. No es ético ni sensato hablar mentiras, pues la mentira tiene corta vida. De un momento a otro lo descubrirán. Además, se pierde la solvencia moral para cuestionar a otros.

La humildad es una virtud que cuesta cultivar pero es muy hermosa, máxime cuando las opiniones las tiene que leer alguien más.

Le puede pasar lo del pastorcito mentiroso.

Deferentemente,