Réquiem para el compañero Quique Wer

Por Marcelo Gullo


Un profundo dolor ha embargado mi alma, el compañero Quique Wer ha pasado a la inmortalidad. Bolívar, Sandino, el Che y Perón lo han tomado de la mano, se lo han llevado, suavemente, al mundo de los héroes, de nuestros héroes. El dolor me hiere, me deja como congelado. Tenía la ilusión de un día poder estrechar su mano. Un grito de dolor recorre las profundidades de la Patria Grande. Desde el Río Grande hasta la Tierra del Fuego, las entrañas de Nuestra América se estremecen. Soñaba poder verlo Presidente en su Patria Chica pero, el Señor se lo ha llevado para que descanse junto a Artigas, Ugarte y Martí. Cuando llegue el día en que nuestras Repúblicas se unan en una sola Gran Patria, escribiremos su nombre en el panteón de los héroes de la Reunificación. No esta lejano ese día, querido compañero Quique Wer. No esta lejano querido compañero Quique el momento en que hagamos justicia a tu nombre, a tu vida, porque el imperio se ha podrido por dentro y, se esta desmoronando. No esta lejana la hora de nuestra liberación y reunificación, si somos capaces de tener tu coraje, tu valentía y tu constancia y, cuando llegue ese día, tu nombre será bandera. No olvidaremos tu nombre porque fuiste ejemplo de lucha y valentía. Desde las orillas del Río que parece un mar, levanto mi vista al cielo, para jurarte que no te olvidaremos.

Escrito con profundo dolor desde Rosario, a orillas del Río Paraná, a las 11, 46 del día 15 de marzo del 2010