SESENTA Y SIETE AÑOS DESPUÉS

Carlos E. Wer*
La Hora, diciembre 9, 2008

El mundo tiene aún lecciones por aprender, o simple y sencillamente recordar. Hace apenas dos días se cumplía el sesenta y siete aniversario del "traicionero ataque", por parte de la Fuerza Aérea del Imperio del Sol Naciente, al puerto y base militar estadounidense, asentada en Pearl Harbor en Hawái.

Al igual que el impacto emocional provocado por los ataques terroristas a las Torres Gemelas de Nueva York, el efecto que produjera la noticia del ataque japonés, rompió las barreras construidas desde Wall Street, en el que los intereses de los banqueros ingleses, entre los que se contaba Prescott Bush, el abuelo del actual fascista presidente estadounidense, trataban de controlar la opinión pública.

Ese nido de fascismo que se conservara aún después de la Segunda Guerra Mundial, sirvió de semilla, para la construcción de los grupos neocons formados desde Chicago por Carl Schmit, el "filósofo", que apoyado por los hermanos Dulles, lograra escapar de la incendiada Alemania.

Pero, volviendo al efecto que produjera Pearl Harbor en el imaginario estadounidense en 1941, y repetido en 2001, los últimos acontecimientos, acaecidos en Bombay , India, durante los ataques terroristas, parecieran tener la misma orientación, la misma intención: provocar en la opinión pública estadounidense, la aceptación de la necesidad de atacar, a los grupos terroristas en "cualquier lugar que se encuentren", ya sea este en Pakistán o en Siria, o en Irán.

Sin embargo, en los Estados Unidos se siente un aire de cambios revolucionarios en la opinión pública, la que manipulada durante el once de Septiembre, ha despertado a la realidad de que la derecha en ese país, liderada, como ayer por Wall Street y las fuerzas fascistas siempre presentes, tratan de empujar nuevamente a sus país a la aventura de la teoría de la "guerra permanente" del clan neocon, que mantenga a los EE.UU. como "única potencia mundial".

Y hoy, después del masivo engaño propiciado por ellos, para provocar la invasión a Afganistán y luego a Irak, son más cautos en el análisis de los acontecimientos provocados en Bombay /Bollywood, especialmente cuando Excecutive Inteligence ha dado la voz de alarma, ante la presencia de grupos terroristas que, reclutados, apoyados, financiados y entrenados por la M-16 de la siempre terrorista Inglaterra, en franca alianza con la ISI saudi, aparecen como aparentes responsables de los ataques. Ataques en los que fueron eliminados siete de los catorce más importantes investigadores antiterroristas hindúes.

La presencia de uno de los terroristas identificados, como el general Hamid Gul, quien fuera Director de la ISI, la agencia de inteligencia saudi, llamado "el Padrino de los talibanes" y cuyo papel principal fuera, el de reclutar para el M-16, fundamentalistas islámicos, prestos a ejecutar actos de terrorismo en su lucha en contra de la invasión soviética a Afganistán.

La inteligencia, tanto hindú como estadounidense, han identificado a miembros de organizaciones islámicas que operan libremente en Inglaterra, y que se movilizan con pasaportes británicos, envueltos en los actos terroristas de Bombay . Los mismos que entrenaran a los talibanes.

¿Será aprendida la experiencia de Pearl Harbor? ¿Y la del 9/11, ç e impedir que los grandes intereses económicos que ven hoy en peligro su enorme poder, lo empujen nuevamente a otra Guerra Mundial?

*Dirigente del Frente Popular SDS